
PH. Jose Rains
Le padre fue quien mejor lo dijo, los españoles encontraron el secreto de la vida: incontables fiestas, feriados, comidas interminables, desayuno en la playa, guerras de agua entre barrios, siestas, comidas y bebidas, comidas y bebidas … y … comidas y bebidas.
Escuchamos acerca de la Ruta Martiana por un amigo en Berlín, y cuando nos mudamos a Palma nos aseguramos de visitarla, exactamente al día siguiente.
Todos los martes una serie de bares en el casco antiguo de Palma organiza la Ruta Martiana (Todavía estamos discutiendo si se llama así por ser los martes o por los Marcianos o ambos, ya que en su logo hay un pequeño marcianito) Estos bares ofrecen a sus clientes una caña (200 ml de cerveza) y una tapa por alrededor 1 o 2 euros.