Una vez por semana al menos recibo mails de Concrete Playground y Big Little City, dos páginas con eventos y cosas para hacer en la ciudad. En uno de esos mails, lei que en el Aotea Square habia una exposicion digital llamada “Emerging pixels” (Pixeles emergentes) y me pareció una gran idea poder ir, jugar un rato, sacar un par de fotos, tal vez filmar un mini video y hacer un posteo para el blog. Lo que no me imaginé es que toda la experiencia iba a ser un fiasco.

La exhibición consiste en unas pantallas gigantes que tienen instalado el accesorio de la Xbox kinetic que captura movimiento, cuando el sensor capta algún movimiento lo traduce en una imagen pixelada que podía verse en la pantalla, a diferentes movimientos y personas, diferentes la imagen formada. La otra pantalla por otro lado mantenía la misma premisa pero se activaba por sonido.

Así que aproveche un dia que pude salir más temprano de la oficina, viaje al centro, agarre mi camara y me fui hasta el Aotea Centre. El lugar estaba completamente vacio, no habia nadie, ni siquiera en el café de la entrada; la exhibición estaba en el piso 2 pero me perdí y termine en el piso 5, 3.4, 1.8 y finalmente llegue al piso 2.

Me descolgué la cartera, busque el sensor de la “Kinetic”, me pare enfrente y salude… no paso nada; solamente una línea parpadeante blanca, así que salte… nada, me movi mas atras… nada, empeze a saltar de un lado al otro, corrí de un lado de la sala al otro… nada. “Tranquiiila… respira”

Pensé “Ok, tal vez esta es la pantalla que se activa por sonido” asi que grite, cante, silbe, hice un par de medialunas mientras aplaudia… nada. Podria haber seguido todo el dia, si no fuese por el guardia de seguridad que apareció después de unos minutos y me pidió que “Me retirara de las instalaciones”
No se si la pantalla estaba rota, apagada o si yo estaba haciendo algo mal, pero si tuviera un sistema de puntaje, esta exhibición sería un COMPLETO DESASTRE.